El fin de los procuradores?
Me hago eco de esta noticia que indica que se ha suscitado una cuestión prejudicial ante el Tribunal de Justicia de la UE pidiendo la desaparición de la figura del procurador.
Entiende que viola la Directiva 2006/123/CE relativa a los servicios, vigente desde diciembre de 2009, y que elimina barreras a la prestación y acceso a servicios.
Se pone como ejemplo la vecina Francia donde se ha eliminado la figura del avoué, el procurador, desde el 1 de enero de 2012, si bien, ya sólo existía en las altas instancias judiciales. En dicho artículo se olvida sin embargo que en Francia para poder ejercer en un partido judicial diferente al suyo, el abogado debe participar asistido de otro abogado de dicho partido judicial que ejerce la llamada postulación, es decir, una figura equivalente al procurador.
En nuestro caso no existe esa limitación por lo que la desaparición del procurador supondría un ahorro de costes al litigante, más aún con la próxima digitalización de las comunicaciones con el Juzgado y por la creación de redes formales e informales de abogados que cubren todo el territorio nacional.
La alternativa para los procuradores pasa por dar un servicio de utilidad para el cliente y de comodidad para el abogado, a un precio competitivo. O por ampliar sus funciones como pretenden a la del Ujier de Justicia, figura que además de determinadas funciones de fe pública es muy útil en las ejecuciones.
En tales casos seguirán siendo útiles como auxiliares de la Justicia y no sería preciso su desaparición.